Mitad de semana y algo nuevo que celebrar...San Isidro. Es una típica fecha en la que la tradición de l@s chulap@s de Madrid entra en juego, con sus consiguientes trajes, bailes, canciones, rosquillas y chocolatadas. Lo primero que hacemos al entrar a la Escuela es colocar una guirnalda larguísima que decorará el escenario de múltiples sorpresas venideras.
Yo personalmente, reniego un poco de las tradiciones, pero comprendo, acepto y me incluyo dentro de su componente cultural y de celebración, y más dentro del ámbito educativo; lo que si creo es que es algo de lo que se puede reflexionar, como en todo, de sus pros y contras.
En todo caso, nuestra mañana ha sido movidita. Hemos puesto música...así que el cuerpo pedía movimiento y baile....mover el cucu vaya. A la pandi, como a todo el mundo generalmente, la música le alegra la vida y le hace tomar una actitud como de más apertura a lo que nos rodea. Esto es algo muy importante a trabajar dentro de las aulas...el movimiento, el ritmo, la escucha, el contacto corporal y/o visual...y qué mejor que con música ¿no?
A mi personalmente me cuesta mucho lo del tema del movimiento; curiosamente soy una persona activa y con dinamismo, pero lo del tema del baile y el ritmo siempre me ha costado un poco. Día a día, trabajo este factor dentro del aula aportando mucho componente emocional hacia l@s bebés. Ell@s mism@s reaccionan ante la música balanceándose o dando palmas, como naciéndoles la sonrisa con el primero de los acordes...es muy bonito.
Tras un largo rato de movimiento, Rosi coge prestado un tambor. Inmediatamente se forma un corrillo y no hay nadie que o quiera experimentar con él.
Tod@s, absolutamente tod@s, queríamos vibrar con este sonido grave, largo y profundo.
Antes de describir minuciosamente la magia que vino después, os dejo con un vídeo donde se ven manos, manos lindas, recogiendo el material utilizado a la indicación de recoger (guardar). Yo no lo sabía, pero con pocos meses de vida, trabajándolo diariamente y sin resultar invasiva en el proceso, la rutina de recoger entra en los planes de l@s bebés.
Hoy además teníamos visita (os recomiendo visitar la E.I. Los Juncos seais quienes seais, hagais lo que hagais o vengais de donde vengais); las mismas abuelitas que vinieron hace unos días a contarnos cuentos, junto con otras nuevas, vienen todos los años en esta fecha vestidas para la ocasión y con un repertorio de canciones tan chulas como el "gat@ de origen"
Un baile por aquí...
...una canción por allá...
...chulapeques acá y allá...
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| Celia, Julia y Tati (de izq a der) |
...grandes cantaoras...
...y más canciones por aquí:
En fin, una fiesta que no acabaría aquí...luego veréis por qué. El día se vestía de cuadros blancos y negros, claveles rojos y pañuelos, mantillas y largos faldones, es decir, un día especial que continuó con una comida rica rica rica...
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| "Torilla, salchichas y filete de pollo empanado" |
Para acabar el día, tanto familias como niños y niñas estaban invitad@s a una chocolatada con churros en el patio. Otro espacio y tiempo creado por las profesionales de Los Juncos para iniciar, reforzar o consolidar lazos y formas de contacto distintas a las que se están acostumbradas. El ambiente olía a dulce y a sol, a comodidad y armonía...a placer; fueron Blanca y Rosi las que se pusieron los guantes y nos atendieron y proporcionaron lo más goloso del día.
L@S PROTAS
Entre las múltiples conversaciones, surgió una muy interesante que tuve la suerte de tocar y participar. Tiene que ver con ser conscientes de que existen pedagogías alternativas en cuanto a la educación se refiere...ni mejores, ni peores, eso ya es personal, pero si más opciones de la estrictamente tradicional o mayoritariamente extendida. Os dejo con un artículo donde introduce algunas de estas pedagogías y en qué están basadas, además de poder buscar un directorio (LUDUS) de 200 iniciativas pedagógicas que no solemos conocer o hablar de ello...merece mucho la pena dedicarle unos minutos, de verdad. Dejo una breve introducción y el link:
“Las pedagogías que se encuentran en el directorio son variadas pero todas tienen en común algunos puntos: el respeto al niño, como no etiquetarle, respetar su individualidad y sus ritmos; enseñar a los niños a colaborar en vez de a competir y considerar la educación como algo que va más allá de un mero desarrollo de destrezas para incorporarse al mundo laboral”, explica la creadora de Ludus, Almudena García.
¿De dónde sacarán l@s niñ@s esa cosa indescriptible que les hace tan únic@s, no puedo evitar equiparar, ¡l@s mejores!?
bEsoS mAyÚsCuLos.
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