Así, a veces, comienza el día en bebés.
Por el saludo comienzan muchas cosas, y esto es algo que continuamente están escuchando l@s más pequeñ@s; importantísimo saludarse y despedirse, y se puede ser con afecto mucho mejor. La canción no está completada, solo me se esa parte y eso que es bastante sencilla. Beti ha saludado a cada un@ de l@s bebés que se encontraban hoy en el aula y hemos hablado de l@s que no han venido. Además, ha sacado las fotografías de cada un@ para ir asociando su propia imagen...el sentido de la identidad y del propio cuerpo.
Hoy hemos visto a una de las amigas utilizar repetidamente este módulo conformado por escaleras.
Nada sencillo para el peque, ha practicado continuamente la subida y bajada de estos peculiares escalones. Para subirlos lo hacía con más agilidad, para bajarlos, depende, o bien sentad@ y arrastrando el culo, o apoyad@ en la pared, o dejándose caer...¡muy bonito de ver!
A raíz de ello, le he preguntado a Bety si es viable organizar un circuito básico de psicomotricidad para esta edad en concreto. Ya sabéis que Celia y yo, dentro de nuestro proyecto, estamos programando actividades donde l@s destinatari@s serán l@s bebés. SuperBeti me orienta comentando que claro que se puede hacer, eso sí, teniendo claro que posturas y tipos de desplazamientos tienen conquistad@s y qué es lo que queremos trabajar. También, en relación a ello, me recomienda un artículo que defiende y aboga por no sentar al bebé si todavía no ha conquistado por sí sol@ dicha postura. Con un enfoque pikleriano, si la profesional/adulto fuerza al bebé a sentarse sin que por sí mism@ lo haya conseguido, le estaremos generando una dependencia, ya que esa nueva postura para él/ella, le supone una limitación cerrada en el sentido en que no sabrán como desquitarse de la misma. Cuando me pase el artículo, hablaré más de ello.
Según Beti me explicaba con qué material contar y qué espacios utilizar, se le ha ocurrido sacar los llamados "paneles sensoriales".
Divididos en módulos y con distintas superficies y materiales, nos hemos descalzado y hemos empezado a tocarlos con todo nuestro cuerpo, especialmente con las manos y los pies. Os dejo con un vídeo donde se pueden ver las distintas superficies:
Ensayando y probando, l@s amig@s discriminan las distintas superficies, incluso aquella que le puede resultar más agradable al tacto o menos. Por ejemplo, una de ellas, está compuesta por pinchitos finitos que al caminar por ell@s, puede resultar incómodo; he podido observar, como algun@s de ell@s, se saltaban este módulo para pasar al siguiente directamente...muy curioso.
Una actividad para trabajar la experimentación sensorial, sobretodo la del tacto...ya sabéis que todos los sentidos están relacionados íntimamente de una manera u otra. Fijaros que herramientas tan preciosas, aquellas que nos llevan y llevarán allí donde nos lo propongamos.
Al acabar, hemos recogido y nos hemos calzado para irnos a disfrutar de los espacios exteriores. en la siguiente foto, se puede ver como hay una zona que hace de entrada al aula, donde Beti expone material de cara a que las familias vean, sepan y se interesen por lo que se ha producido en el aula. Parece que Beti se ha sacado el carné de escaparatista, ya que su estética y delicadeza, se puede ver reflejada en este precioso rincón.
Mañana o el Viernes, hablaré sobre el momento del cambio aquí en bebés, tan mágico o más como los que viví en el aula de 2-3 años; pero como adelanto, aquí tenéis esta fantástica foto donde una pañal, puede parecer un estiloso vaquero jejejeje.
Hoy había claustro, y han tenido la amabildiad de invitarnos para que tomemos contacto en la forma manera que tienen de organizarse, de tomar decisiones, de reflexionar en equipo...en fin, de mostrarnos en dos horas y casi sin darnos cuenta, cómo han llegado a convertirse y ser, un equipazo en toda regla sin la necesidad de tener grandes presupuestos que les respalden.
Nos han gastado una especie de broma a las alumnas de prácticas, y es que, al empezar la reunión, han estado cerca de 5 minutos dramatizando y ejecutando actitudes, que precisamente no tienen cabida ni benefician al progreso y a la toma de decisiones. De repente, Blanca, toca un silbato como para indicar el final del partido y todas se comienzan a reír. De una manera amena y original, nos querían dar una lección magistral (más). Todo estaba preparado justamente para que nos diésemos cuenta, qué cosas fallan en el trabajo en equipo: no escuchar ni respetar turnos, alzar la voz incluso faltarse al respeto son algunas de las cosas que hemos podido ver...imaginaros nuestras caras cuando se ha acabado la trampa jejejeje.
Para este claustro, como para los de antes y los que vendrán, siempre se llega con una acta con el orden del día donde vienen los puntos a tratar. Siempre hay una moderadora que organiza los turnos de palabra, y una especie de secretaria que recoge y registra todo lo tratado para luego elaborar el acta final. Yo, que tengo experiencia en cuanto a reuniones de equipo se refiere, jamás había presenciado tan majestuosa autoregulación del propio equipo para que todo lo que haya que hablar, decidir, pensar y reflexionar, se haga de esta manera tan sana, favorecedora/ capacitadora/ facilitadora y constructiva. ¡Increíble!
Para acabar, y con mucha relación en cuanto al tipo de relaciones que se pueden establecer entre familias y escuela, adjunto información sobre este curso en concreto. Gracias a Mar por siempre estar pendiente.
También el link con más información:
Me despido no sin antes mostraros cómo ha quedado mi camiseta al final del día. Esta vez no resaltan las babas, ni los moquetes...si no pasta de dientes que me he tirado por encima jajajaja....porque de vez en cuando, no está de más dejarse llevar ¿no?
Besos inspirados ell@s.
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