"Día 43"

Semana nueva (última entera), aula nueva...y lo mejor de todo...¡pandi nueva!. Esta vez me adentro en el aula del pollo:

Bajo sus alas me resguardo y me protejo; me recibe mi próxima,última y gran tutora... JULIA, mi vecina del sexto (yo soy del quinto) a la cual conozco de toda la vida; bella coincidencia...mi suerte no se agota. Ella comanda, junto con el resto de comandantes y comandantas (exista o no la palabra) una de las aulas de 1-2 años, compuesta por 14 niños y niñas. Esta semana, de aquí al Jueves tendré la oportunidad y el placer de incluirme en su proceso y podremos hablar un poquillo sobre esta etapa, lo que de tiempo. Como siempre, pienso exprimirlo al máximo y estar dispuesto y accesible a todo lo que se me brinde, teniendo en cuenta que por encima de todo estoy como observador.

Antes de que llegasen l@s amig@s, Julia había organizado el aula por rincones con múltiples alternativas de acción para que libremente, cada un@ se centrase en el que quisiese, pero antes de nada, una panorámica del aula, con sus respectivas divisiones entre rincones para que queden bien diferenciados.

Esa separación de espacios puede hacerse con todo lo que se nos ocurra, en este caso, están hechas mediante tacos y muebles.

En la mesa donde comen, estaban colocados coches y vehículos de juguetes para poder rodarlos y hacer como si fuésemos valientes pilotos.

La mesa de los puzles, para poder practicar la pinza y nuestras ganas de encajar todo en sus sitio. Dos de animales y uno sobre los distintos objetos que podemos encontrar en un lavabo.

El rincón de la cocina, la cama y los productos de higiene y cosmética. Muchas posibilidades en este roncón que se ubica en una de las esquinas del aula, con su propia mesa típica de comedor y os utensilios necesarios para poner en marcha el juego simbólico.

La estructura con tobogán, la cual, tienen perfectamente superada y controlada a la hora de subir, bajar (sea de la forma que sea) y ver desde lo alto las cosas con otra perspectiva.

Y por último el rincón del tatami, donde Julia ha dispuesto varios objetos de madera para practicar y jugar distintas acciones de motricidad gruesa y sobretodo fina.

Según han ido llegando l@s amig@s y las familias, Julia me ha presentado dulcemente para facilitarme la acogida...menuda bienvenida...ni el mejor rey (si es que existe) la hubiera tenido tan buena y que mejor que decir esto hoy. A algun@s de ell@s ya les conocía tras haber coincidido en el patio, otr@s me han extrañado, pero en cuestión de tiempo ell@s demuestras quesu proceso de adaptación es mucho más eficaz que el de l@s adultos en algunas ocasiones.

Tod@s en el aula, hemos realizado la asamblea y repasado quien no ha venido. Para "pasar lista" Julia ha confeccionado un libro que muestra fachadas de casas decoradas donde hay una puerta, llamamos, y nos recibe un@ de l@s amig@s.

Esta especie de juego les encanta; se saben de memoria el orden en el que aparecen y dicen en alto su propio nombre y el del resto de l@s amig@s. ¿Os imagináis pasar lista de esta manera en el resto de etapas educativas? Sería fantástica hacerlo así en los ciclos o incluso en las universidades ¿Por qué no? 

Alguna canción que otra (me las tengo que estudiar y aprender) y a contar un cuento sobre viajes y aventuras.

Concretamente, Julia ha contado el de "¡Tierra a la vista, Señor Coc!", un cuento sobre un viaje por el mar en busca de un tesoro escondido en una isla exótica. Sus personajes, animales piratas, tienen su propio nombre y sus propias funciones.

El Señor Coc es el capitán de los animales piratas; Ensina la elefanta pirata; Lulú la gata traviesa; Lupo el lobo intrépido...y algún personaje más que pondrá todo de su parte para llegar a encontrar el tesoro.

Un cuento que anticipan a la perfección l@s amig@s; se denota brillo en sus ojos de la emoción de encontrar un tesoro que ya ha encontrado cientos de veces, hecho, que no les resta ilusión....si aprendiéramos más de ell@s...

Para saber el final del cuento... no se me ocurre mejor manera que proponérselo a Julia, o incluso a l@s amig@s, no quedaréis indiferentes. Julia ha hecho mucho hincapié en las descripciones de los paisajes y el el nombre, indumentaria y acciones que realizan los propios personajes. ¡Un lujazo!, tanto, que casi me pongo a participar y en primera fila, pero me he contenido.

Tras esto, hemos bajado un rato al patio; hemos vuelto a subir para que se aseasen l@s amig@s y se preparasen para comer. Después de comer, juego libre en el aula o en la superterraza mientras llegaban los momentos del cambio de pañal. Todo esto lo contaré más detalladamente durante los próximos días. Antes de la siesta, aquí si me vuelvo a detener un poco más, Julia crea un espacio, tiempo y momento para calmarse, volver a recibir cuentos y canciones ambientado todo ello con canciones más relajadas. Además, han tenido la oportunidad de andar por las nubes de colores con un una especie de circuito al que parece, están muy acostumbrad@s y se manejan a la perfección.

Tan sencillo como poner en fila unos cuantos tacos desde el sofá hasta el tobogán, dando la sensación de estar recorriendo las pasarelas y torretas de un gran castillo.

Como dije antes, nos relajamos buscando al ratón o ratona "Maysi", un cuento preferente para ell@s, ya que Julia les ha dado la opción de elegirlos y entre otras propuestas que también se han contado, na de ellas has sido la de este curioso personaje, que parece es difícil encontrale mientras aprendemos y repasamos el nombre de otros animales.

Buenísima la adaptación que hace Julia según va pasando las páginas. Como os digo el cuento trata sobre la búsqueda del ratón Mayse; para ello vamos descubriendo distintos animales, cosa que aprovecha Julia para cantar una canción específica sobre ese animal. Por ejemplo, cuando aparece el cocodrilo, canta la canción del cocodrilo...los mismo ocurre cuando aparece el burro (burro Pepe) o  la ardilla entre otros (esta noche si me da tiempo, os grabo algunas de esas canciones)

Tras este recital de lujo, se quitan el calzado, lo colocan en su sitio y list@s para acomodarse en sus colchones. Durante la siesta hemos intercambiado opiniones, reflexiones y criterios tanto metodológicos como pedagógicos...un auténtico placer poder conversar con Julia sobre esto, y sobre todo en general, tendrías que conocerla y verla...su sonrisa la caracteriza...¡me encanta!

Lo dicho, esta semana cambian un poco las tornas así que iremos descubriendo nuevas cosas junt@s; ojalá diese tiempo a más, peor muy a mi pesar, esto se acaba a marchas forzadas. Si tengo tiempo, luego subo los vídeos y comento alguna cosa más.

Gracias a Julia por la acogida, su entusiasmo y su profesionalidad. La cartera de modelos y referentes que me voy a llevar de la E.I. Juncos, no tiene precio ni desperdicio

Aprovecho la ocasión para despedirme con un "Salud y República"

Besos que jamás abdicarán.